*Francisco
Castro
“Para
ser feliz, crecer como persona”, es el título de uno de los libros editados por
el Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias (ISTIC), dentro de la
colección Diálogo Fe-Cultura, cuyo autor fue rector del Seminario, don Lucio
González Gorrín, excelente persona y excelente párroco.
Es
un libro abierto a todo el mundo, a quienes quieren saber qué es una persona,
es decir, una realidad hacia dentro y hacia fuera; una guía para crecer como
persona, para encontrar nuestras sensibilidades, para saber en qué consiste ese
equilibrio tan necesario entre lo interno y lo externo, entre los ámbitos
espirituales y materiales.
En
este libro, don Lucio González Gorrín hace un recorrido muy completo, en el que
explica con sencillez pero de forma directa qué es la felicidad según la Psicología;
qué quiere decir amar para ser uno mismo y, junto con esta categoría, en qué
consiste respetarse y respetar; porque amar es perdonar; cómo se forma la personalidad,
el temperamento y el carácter. Al mismo tiempo, hace una clasificación de los
tipos de personalidades. Desde aquí va hacia la madurez de la persona. Veamos
algunos rasgos de la personalidad madura: autonomía; emoción positiva;
seguridad; realismo; sentido del humor; proyecto de vida; educación de la
mentalidad y del corazón, así como sexualidad sana.
“Para
ser feliz, crecer como persona” es un libro para jóvenes y adultos, un libro
necesario para leer y releer, un libro, en definitiva, para tenerlo de
consulta.
Este
volumen lo completamos con otro del mismo autor, titulado “El Diálogo
Fé-Cultura en la Nueva Evangelización”, de total actualidad, porque habla de la
cultura “dominante”. Aunque Nueva Evangelización no es una misión-enseñanza
nueva de la Iglesia, de alguna manera don Lucio se adelanta desde su ecclesia
local al desarrollo del Magisterio y al reciente anuncio de Benedicto XVI sobre
este reto que la Iglesia va a mostrar al mundo, a partir de ahora con más
fuerza, por ex cathedra del Santo Padre.
Ya
hemos comentado en otras ocasiones que esta cultura emanada de lo que de
momento denominan como posmodernidad, aunque tiene su raíz tras la II Guerra
Mundial, presenta sus aspectos positivos, pero otros muy negativos respecto al
ámbito personal y familiar.
El
Concilio Vaticano II (CVII) ya hablaba, en su constitución Gaudium et Spes, de
que “el género humano se halla hoy ante un período nuevo de su historia,
caracterizado por cambios profundos y acelerados, que progresivamente se
extienden al universo entero. Los provoca el hombre con su inteligencia y
actividad creadora; pero recaen luego sobre el hombre, sufre sus juicios y
deseos individuales y colectivos, sobre sus modos de pensar y su comportamiento
para con las realidades y los hombres con quienes convive. Tal es así que se
puede hablar de una metamorfosis social y cultural que redunda también sobre la
vida religiosa”.
Precisamente,
don Lucio González Gorrrín comenta el mensaje del CVII, explica qué es el Diálogo
Fe-Cultura y habla de una Iglesia, la Católica, en permanente diálogo con la
cultura actual; la Iglesia es promotora de cultura, pero siempre desde su base
en Cristo, que se hizo hombre para el bien de todos sus hermanos, sin
distinción, aunque en su misión pública se volcó en los más necesitados. “Ya no
hay judío y griego, esclavo y libre, hombre y mujer, porque todos vosotros sois
uno en Cristo Jesús” (Gal 3,28).
Don
Lucio González Gorrín explica la diferencia entre la fe y la cultura; hace una
aproximación a la cultura actual; da las claves sobre la increencia, el ateísmo
y el agnosticismo; desglosa los diferentes tipos de humanismo e indica la
originalidad de la Nueva Evangelización.
Por
último, una publicación, más reciente, dentro de la misma colección, se titula
“El Santo Hermano Pedro, expresión del Diálogo Fe-Cultura”. Se trata de una
aproximación a la personalidad del santo canario en el arte universal, tanto en
la escultura, pintura como literatura y la inspiración respecto a la Orden de
Belén.
Aunque
no es intención hablar de mí en estos espacios, sino de la Iglesia, de alguna
manera comparto mi experiencia. Me gustaría destacar que don Lucio ha sido inspirador
del tema de mi tesina, y su libro sobre “Cultura y Nueva Evangelización” lo
tengo de referencia, es un “compendio” sencillo y directo sobre la materia. Y, cómo no, los otros volúmenes citados.
Hoy
más que nunca la Iglesia necesita la acción del laicado. Benedicto XVI acaba de
decir hace unos días que “el laicismo ha eclipsado el sentido de Dios”. Porque ser
laico es una cosa; ser laicista, otra, y ser laicista radical, otra. “Mejor es
adquirir sabiduría que oro, más vale inteligencia que plata” (Pr 16,15).
Don
Lucio González Gorrín nació en Guía de Isora el 21 de septiembre de 1942. Cursó
estudios de Latín y Humanidades, Filosofía y Teología en el Seminario Diocesano
de Tenerife (1955-1967). Es Licenciado en Estudios Eclesiásticos, así como en
Filosofía y Letras-Románicas y en Psicología. Fue rector del Seminario
Diocesano de Tenerife y director del Centro de Estudios Teológicos. Y sobre
todo hay que destacar su talento como persona y como párroco.
*Periodista.
Estudiante de Ciencias Religiosas, en Tesina de Licenciatura.