martes, 14 de febrero de 2012

BIOÉTICA Y CINE: LA BIOÉTICA, A DEBATE EN EL ISTIC

DIARIO DE AVISOS ha publicado este martes 14 en su contraportada un nuevo reportaje sobre "La persona y familia", en el que en esta ocasión cita y describe el contenido la de XVII Jornada Ética y Política, organizada por el Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias, ISTIC, y la ULL, que tendrá lugar los próximo 27,28 y 29 de febrero, bajo el títuto: "Bioética y Cine".


Tomas Domingo Moratalla. FOTO: Esteban Glez.

Tomás Domingo Moratalla: “necesitamos más educación para la responsabilidad y autonomía humana”


Si de persona y familia se habla, no se puede eludir la bioética y la humanización de la salud. Sobre ello, nos documenta el Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias, ISTIC, que cuenta ya desde hace unos años con el Posgrado Experto Especialista en Humanización de la Salud y quien para sus XVII Jornadas de Ética y Política ha previsto organizar tres días de ponencias bajo el título “Bioética y cine”.

Los organizadores de esta jornadas -27, 28 y 29 de febrero- han invitado como ponente, al profesor de Filosofía Moral de la Universidad Complutense de Madrid, Tomás Domingo Moratalla, para el que “la bioética nace básicamente como una respuesta reflexiva y crítica a los avances científicos y tecnológicos que se han desarrollado en las últimas décadas. Cuestiona, de alguna manera, el imperativo tecnológico, que vendría a decir que aquello que puede hacerse debe hacerse; y propone un imperativo ético, prudencial, que señala que quizás no todo lo que puede hacerse debe hacerse”, apunta. “No se trata de ver la bioética como la encargada de prohibir o sancionar. Se trata, simplemente, de que el desarrollo científico y tecnológico vaya acompañado de una reflexión sobre las implicaciones valorativas que sin duda tiene. El desarrollo tecnocientífico implica un mayor poder, y cuando el poder aumenta ha de aumentar también la responsabilidad”.

En torno a la necesidad de la educación hacia la responsabilidad, añade que “la ética como la bioética son necesarias, y cada vez más necesarias. Nos estamos encontrando problemas nuevos, situaciones nuevas, y el recurso a la legislación es bastante débil, desde un punto de vista moral. Evitando el tono derrotista diría que necesitamos más ética, más bioética, o dicho de otra manera teniendo en cuenta la definición de bioética, necesitamos más educación para la responsabilidad, para la prudencia y la autonomía humana o de la persona”.

Finalmente, una de las últimas publicaciones de Moratalla en 2011 guarda relación con el tema de las jornadas del ISTIC: “Bioética y cine. De la narración a la deliberación”. Y claro surge la duda sobre qué relación guardan ambos temas. “El cine refleja la vida, al cine le interesan los problemas, los conflictos, etcétera; y el mundo de la bioética, de la ética, es un buen lugar donde encontrarlos. La bioética nutre al cine de argumentos”. Para este especialista en Filosofía Moral el cine también es su laboratorio de trabajo. “Lo mismo que los biólogos o los farmacéuticos, los que nos dedicamos a la ética o a la bioética tenemos nuestros laboratorios: como lo son la vida, la experiencia, el cine. Con sus recursos imaginativos, el cine puede ser un buen laboratorio moral”, apostilla.