
De esta forma, don Mauricio González (Icod de los Vinos, 1933), un sacerdote con más de media vida dedica a Jesucristo y a los demás, sigue activo como párroco de la Iglesia de la Concepción en la capital tinerfeña. Este presbítero fue ordenado sacerdote por el Obispo don Domingo Pérez Cáceres en 1957. Desde ese momento ha ejercido como coadjutor de La Cuesta-Cáritas, párroco de Taco, director espiritual del Seminario Mayor, profesor del Seminario, rector del Seminario, vicario general de tres obispos sucesivamente, Canónigo Dignidad de Arcediano Vitalicia, deán del Cabildo Catedral durante años y párroco de La Concepción en la actualidad. Asimismo, su pueblo natal Icod de los Vinos, ha reconocido su entrega pastoral y humana con una calle que lleva su nombre.
Pero la docencia también ha jugado un papel relevante en la vida de este hombre de Dios. Fue profesor de la Escuela de Peritos Agrícolas de la ULL entre los años 1964 y 1968, así como de la Escuela de Magisterio, entre 1965 y 1967. Siendo igualmente formador de “Teología Fundamental y Eclesiología”, tanto en el Seminario afiliado, en su momento, como actualmente lo es en el ISTIC de Tenerife. Sencillamente, don Mauricio aseguran que es: “Un sacerdote al que le preocupa el acompañamiento vocacional, inquieto intelectualmente y actualizado, con sentido de Iglesia y amor a su Diócesis”.