Un momento del homenaje al doctor José González Luis. |
El pasado martes 18, en el Aula de Audiovisuales de la Facultad de Filología de la Universidad de La Laguna, se celebró el homenaje al doctor José González Luis, párroco del Santísimo Cristo Redentor en Las Chumberas, canónigo bibliotecario de la Catedral y profesor del ISTIC, sede de Tenerife, así como profesor de Filología Latina en la ULL y especialista en el Padre Anchieta.
Al acto asistieron un gran número de personas vinculadas al mundo académico, de la parroquia y del clero diocesano. Se contó con la presencia del vicario general, Domingo Navarro, el secretario general del ISTIC, José Domingo Morales y los profesores, compañeros del doctor González Luis, Juan Pedro Rivero y Macario López. Así como distintos compañeros del Departamento de Filología Clásica y Árabe, que han compartido estos años de docencia con José González
Presidió el acto la directora del departamento de Filología Clásica y Árabe, María José Martínez. El helenista, Juan Barreto, miembro también de este departamento en el Área de Griego, hizo la presentación del número homenaje al profesor González Luis de la revista Fortunatae, publicación periódica del departamento, que en este número se concentra en un homenaje al doctor José González Luis con motivo de su jubilación.
Seguidamente, Manuel García Teijeiro, catedrático emérito de Filología Griega de la Universidad de Valladolid, impartió la conferencia "Mundo clásico y mundo cristiano". Una ponencia con la que se quizo hacer comprender el mundo antiguo en el que nace, crece y se incultura el cristianismo. Un mundo, a cuyo estudio trilingüe (hebreo, latín y griego), ha dedicado su vida académica el profesor González Luis, tanto en el ámbito universitario civil, como en el teológico-bíblico como miembro de la ABE (Asociación Bíblica Española), uno de cuyos últimos congresos organizó activamente en Tenerife, en septiembre de 2008.
Por último, el profesor González Luis, repasó su vida académica, agradeciendo a muchas personas que han influido en él o colaborado positivamente con él, en el ámbito académico. Mencionó algunas anécdotas y finalizó afirmando que uno de la enseñanza no se jubila por la edad, el afán investigador, aunque se deje la docencia activa, sigue estando presente siempre.