Antonio Pérez, Vicario General: "este libro nos abre a la esperanza en este fascinante y complejo siglo XXI"
Este lunes se presentó en el ISTIC, sede de Tenerife, una nueva publicación de la Colección Diálogo Fe-Cultura, "Pensadoras del siglo XX". El acto fue presidido por el vicario general de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna, Antonio Pérez, al que acompañaron el propio autor de la obra, el cirujano y máster en Bioética, Iván López, así como la vicerrectora de Relaciones Universidad Sociedad de la ULL, Nélida Rancel, y el decano de la Facultad de Medicina de la ULL, Emilio Sanz. Presentó el acto el director del ISTIC, Juan Pedro Rivero.
Antonio Pérez insistió en la importancia de este tipo de publicaciones como "Pensadoras del siglo XX", en la que se nos ayuda a descubrir a cinco pensadoras del pasado siglo que "desde posiciones distintas y diversas y en situaciones complejas, permanecieron abiertas a la trascendencia y, desde ella, nos abren a la esperanza en este fascinante y complejo siglo XXI".
Igualmente, en las intervenciones de Nélida Ráncel, Emilio Sanz y el director del ISTIC, Juan Pedro Rivero, se señaló el interés de esta obra como elemento de esperanza, hecho que describió perfectamente el autor, Iván López durante su intervención, de la que ofrecemos una reseña a continuación:
"El libro analiza la vida y obra
de cinco intelectuales nacidas a finales del siglo XIX y que desarrollan su
pensamiento fundamentalmente durante el siglo XX: Simone Weil, María Zambrano,
Edith Stein, Hannah Arendt y Elisabeth Kübler-Ross. Las cuatro primeras son
eminentes filósofas. La última es una psiquiatra. La idea original del estudio
no es tanto la de dar a conocer el núcleo de su pensamiento (ya existen muchos
y mejores trabajos en este sentido), sino la de explicar que las ideas éticas
que nos ofrecen estas intelectuales nos pueden servir para la crisis de la
cultura actual, la del siglo XXI: este sí es un enfoque original, que merece la
pena ser escrito.
Las pensadoras analizadas,
fundamentalmente las filósofas, tuvieron que afrontar la crisis del racionalismo.
El racionalismo, con sus diferentes desarrollos históricos (el último fue el
positivismo de finales del siglo XIX: lo que no se pueda pesar y medir no es
racional, no “existe”), supuso la confianza absoluta en la Razón, la Ciencia y
el Progreso: con estos triunfos el
hombre se emancipa de tod (Dios incluido) y es el soberano absoluto de su
propia moral (el mito del hombre nuevo). Esta ideología comienza en el siglo
XVII y tiene una vigencia de tres siglos: la Modernidad. Pero a comienzos del siglo
XX, las sociedades hijas del racionalismo usarán la ciencia para desarrollar
armas y entrarán en la Gran Guerra con el resultado de 20 millones de muertos.
Esta es la crisis a la que se enfrentan nuestras pensadoras: ¿cómo encontrar
una filosofía de recambio que sustituya a la que nos ha llevado a un caos
brutal y sin precedentes?
Evidentemente, ahora no estamos
en la misma situación, sino en una crisis que se puede denominar como la
posmodernidad: se rechaza la confianza en la razón y se habla de que después de
Auschwitz ya no se puede hablar de verdad ni de bien ni de belleza: la
desconfianza en la razón, la razón débil. Y esto lleva a la “muerte del
hombre”, es decir, a la muerte de los valores en la sociedad. Lo que defiendo
en mi libro, junto con algunos pensadores actuales, es que esta crisis (el
relativismo total, el escepticismo que deja a las personas sin referencias
morales) es el último capítulo de la Modernidad, porque sigue compartiendo con
ella el mito de la emancipación del ser humano, ahora sin confianza en la razón
después de la borrachera del positivismo y de la Ilustración. Por ello, el
universo precioso y pleno de esperanza,
de confianza en el ser humano, ofrecido por estas pensadoras puede ser
una pieza preciosa para reencantar el mundo y ayudar al ser humano a salir de
la crisis moral en la que se encuentra la cultura actual.
En la segunda parte del libro se
termina con tres capítulos distintos en los que, partiendo ahora de la
cosmovisión ofrecida por las pensadoras, se habla de educación en el mundo
complejo en el que existen diferentes códigos éticos (educar para la
pluralidad); el acceso a la trascendencia (Reencantar el mundo) aprovechando un
comentario a una obra del escritor ingles Chesterton, Ortodoxia; y, por último,
un capítulo sobre el vivir diario, con rutina pero esperanzado en un horizonte
trascendente, ahora aprovechando la poesía de un escritor actual tinerfeño,
Carlos Javier Morales".
Sólo queda una cosa ahora, leer un texto, "Pensadoras del siglo XX", el cual, de verdad, ayudará a encontrar un momento de esperanza a este complicado siglo XXI, pero un tiempo lleno también de muchas esperanzas.
FOTOGRAFÍA: Esteban González
INFORMACIÓN: Domingo J. Jorge, responsable de Comunicación del ISTIC